Lo que va mal, no se toca

Por Paco Fochs

Si, han leído bien el titular. Les puede pasar como a un servidor que no deja de alucinar, ya que siempre creyó que lo que iba bien no debía tocarse, pero lo que iba mal merecía que se entrara a saco para reformarlo. Pues no. En estos años se ha tocado lo que iba bien y se ha convertido en intocable lo que en general se piensa que va mal.

Siguiendo esta nueva filosofía, si al gobierno le sacan tarjeta amarilla en las últimas elecciones, lo mejor es seguir igual. Sin cambiar el paso o el ademán. Así todo. La doctrina práctica es la que escribió el presidente del gobierno a un íntimo colaborador: “Luis se fuerte, aguanta…”

Luis lleva ya un tiempo en la cárcel…

Así que según la doctrina imperante, al partido político en el poder no le toca más que aguantar. Este es el mantra al que se agarran, cada vez más desanimados, los cargos, militantes y simpatizantes del PP.

Si como se ha demostrado en recientes elecciones, la indignación popular ya sube a las instituciones, se les tacha de frikies y a otra cosa. Si hay dirigentes implicados en eso que se llama corrupción, pues mejor negarlo y no investigar. Si lo del estado de las autonomías falla por todos lados, pues que pereza meterse en este jardín.  Lo suyo es aguantar y mantener todo lo malo que ya es muy difícil disimular.

Para ellos la solución es controlar todos los medios de comunicación posibles y que estos digan que todo va bien.

En efecto, va bien para un porcentaje de la población que ya les iba bien y que en el último año se ha desprendido del miedo que tenían ante una nueva situación y se han cansado de tanta “austeridad”. Pero unos y otros estarán (estaremos) de acuerdo en que esta no es la auténtica realidad.

Opino que paulatinamente la gente del PP va a dejar de aguantar…No será un servidor quién se lo reproche.