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| Por Concha Carbajo |
En el Teatro Real se ha
estrenado la ópera El Elixir de Amor
de Gaetano Donizetti que representa
el inicio de un período de paz y ausencia de controversias entre público y
dirección artística del teatro, muy de acuerdo con las fechas navideñas.
El elixir tiene todos los
ingredientes para no ser discutido y bien aceptado por el público en general: un
“melodramma jocoso”, bel canto, arias muy conocidas, buenos cantantes,
dirección musical sin complicaciones del Maestro
Marc Piollet, y una Dirección Escénica de Damiano Michieletto, muy original dentro de un respeto al libreto.
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| Ismael Jordi |
La puesta en escena
recrea un chiringuito de playa que está a
cargo de Anina. En el figura como socorrista su enamorado Nemorino, el
sargento Belcore es un cliente habitual dado que es pretendiente de Anina y el
curandero Dulcamara tiene rasgos similares a lo que hoy en día conocemos como
un “camello”.
La trama, así propuesta,
funciona perfectamente, aunque opino que la dirección escénica se ha enamorado
de su propia y acertada idea y convierte el escenario en un abuso de todo tipo
de atracciones y tópicos playeros; alguno de ellos excesivos, como un baño de
espuma que, reconozcámoslo, no es tan habitual en nuestras playas. En ocasiones
estos elementos distraen más que
aportan.
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| Camilla Tilling y José Carbó |
La obra exige la
presencia de buenos cantantes repartidos en tres elencos para cubrir las fechas
programadas: Celso Albelo, Ismael Jordi y Antonio Poli como tenores en el papel de Nemorino, las sopranos Camilla Tilling, Nino Machaidze y Eleonora Buratto como Adina, Fabio Maria Capitanucci, José Carbó como Belcore, Erwin Schrott, Paolo Bordogna como
Dulcamara y Ruth Rosique, Mariangela Sicilia como Gianenetta, cumplen
con sobresaliente sus respectivos papeles.
Por último indicar que si
pese al número de representaciones alguien no puede acudir, me complace
comunicarles que en YouTube tienen a su
disposición la ópera integra con la misma producción y cantada por Celso Albelo ya que fue grabada en
Palermo el pasado año.
Que nadie se quede sin
disfrutarla.
Uffffffffffff, los baños de espuma no son frecuentes en nuestras playas, pero me temo que ya son demasiado habituales sobre los escenarios operísticos....Gracias por la recomendación! El coleccionista
ResponderEliminarGracias por la noticia del youtube.
ResponderEliminarPersonalmente, me cargan un poco las puestas en escena tan rocambolescas que se estilan. Por aquí,la fura dels baus se pasa para mi gusto, y a veces también Calisto Bieito.